Fuente: FEPEX 19 Mayo 2017

El consumo de frutas y hortalizas frescas en los hogares españoles sigue descendiendo en los dos primeros meses de 2017

El consumo de frutas y hortalizas frescas en los hogares españoles ha descendido un 6% en enero y febrero de 2017 con relación a los mismos meses del año anterior, totalizando 1.188 millones de kilos, mientras que el gasto ha aumentado un 2,5% ascendiendo a 1.779 millones de euros, según los datos del Panel de Consumo Alimentario del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, hechos públicos esta semana.

El descenso del volumen consumido en los hogares se ha producido en los tres subsectores: frutas, con un 6% menos, totalizando 633 millones de kilos, hortalizas, con un 9% menos y 395 millones de kilos consumidos y patata, con un 0,4% menos y 161 millones de kilos consumidos.

En cuanto al gasto en los hogares, ha descendido para las frutas, con un 0,6% menos, totalizando 906 millones de euros, mientras que el gasto en hortalizas ha subido un 5,7%, totalizando 752 millones de euros y en patatas ha aumentado un 7,2%, totalizando 121 millones de euros.

Por productos, la demanda en los hogares se ha reducido para la mayoría de las hortalizas, con un descenso significativo en el caso del tomate, con un 9,5% menos, totalizando 75 millones de kilos, la cebolla con un 1,3% menos, situándose en 51 millones de kilos, el pimiento con un 8% menos y 28 millones de kilos consumidos y la lechuga/escarola/endibia, con un 10% menos y 26 millones de kilos.

Descienden también las principales frutas consumidas en los hogares en estos dos meses: naranja con 194 millones de kilos (-9%), plátano con 93 millones de kilos (-0,4%, manzana con 86 millones de kilos (-7,6%), mandarina, con 81 millones de kilos (-6%) y pera, con 40 millones de kilos (-9,5%).

Para FEPEX, que siga descendiendo el consumo en los hogares es preocupante y contradictorio, ya que las frutas y hortalizas frescas son consideradas los principales componentes de una dieta sana. Por ello, se considera importante reforzar la comunicación y no sólo en el ámbito educativo, buscando, además, la colaboración de las distintas administraciones implicadas, principalmente del ámbito sanitario, puesto que el mantenimiento de una dieta sana entre la población contribuye a la reducción del gasto sanitario.