Fuente: FEPEX 21 Mayo 2019

Fuerte retroceso del 15% de la exportación comunitaria de frutas y hortalizas a países terceros en 2018

La exportación comunitaria de frutas y hortalizas a países de fuera de la UE en 2018 se redujo un 15% en volumen con relación al año anterior, totalizando 5,4 millones de toneladas y un 5% en valor, situándose en 4.666 millones de euros, según los últimos datos actualizados por la Oficina Europea de Estadística, Eurostat, continuando la tendencia descendente de los últimos cinco años.

La exportación de hortalizas comunitarias en 2018 a países terceros se situó en 2,7 millones de toneladas, un 12% menos que en 2017 por un valor de 2.052 millones de euros, un 1% menos, siendo patata y  cebolla las hortalizas más exportadas, con 1,1 millones de toneladas en el caso de la patata (-10%) y  847.924 toneladas en el caso de la cebolla (-17%).

Las ventas de frutas de la UE a países extracomunitarios se redujo un 18% en volumen con relación a 2017, totalizando 2,6 millones de toneladas,  por un valor de 2.613 millones de euros, un 8% menos, siendo la manzana la más exportada con  843.526 toneladas, que registró un fuerte descenso del 34%, seguida a distancia de naranja, con 318.036 toneladas (+6%) y pera con 311.610 toneladas (-8%).

Los datos de 2018 reflejan la tendencia a la baja de las ventas comunitarias de frutas y hortalizas a países terceros. En el último quinquenio han descendido todos los años, pasando de 7,7 millones de toneladas en 2014 a 7,2 millones de toneladas en 2015, a 6,5  millones de toneladas en 2016, a 6,4 millones de toneladas en 2017 y 5,4 millones de toneladas el año pasado. En valor se ha pasado de 5.377 millones de euros en 2014, 4.943 millones de euros en 2015, 4.968 millones de euros en 2016, 4.924 millones de euros en 2017 y 4.666 millones de euros el año pasado, según datos de Eurostat.

Esta evolución pone en evidencia, según FEPEX, la dificultad que tienen los productores comunitarios para vender frutas y hortalizas en países terceros, mientras que la UE es un mercado cada vez más globalizado, sin que se incorpore el principio de reciprocidad en las negociaciones comerciales.