Fuente:
FEPEX
25 Octubre 2022
Los productores de patata y de frutas y hortalizas de Francia cifran entre el 400 y 500% el incremento del gasto energético en los almacenes
En Francia, los productores de patata para consumo (UNPT) y de patata de siembra (FN3PT) junto con la sectorial de frutas (FNPF) y de hortalizas (Légumes de France) han emitido un comunicado conjunto en el que cifran entre un 400% y 500% el incremento del precio medio de la electricidad en 2023 para los almacenes hortofrutícolas con una potencia superior a 36 Kwa y piden al gobierno ayudas.
El almacenamiento de las cosechas en cámaras frigoríficas depende en gran medida de la energía eléctrica (ventilación, refrigeración), y es el elemento central del modelo económico de muchos productores de patatas (de consumo y de siembra), así como de determinados productores de frutas y verduras (zanahorias, manzanas, peras, kiwis, etc.). El almacenamiento permite abastecer el mercado durante todo el año en condiciones óptimas (de 0 a 8° C), a veces incluso compensando la retirada de las sustancias activas utilizadas hasta ahora para el almacenamiento (como en el caso de la prohibición de CIPC en las patatas en 2020).
Según las organizaciones francesas, debido al alza continuo de los precios de la energía, el coste de la factura del almacenamiento de las cosechas, ligado a los contratos eléctricos, alcanzará niveles “estratosféricos” la próxima campaña. Y destacan que este momento es decisivo porque en estos meses entre la mitad y las tres cuartas partes de los productores están o estarán en proceso de renegociar sus contratos de electricidad para el próximo año para potencias superiores 36 kwa (o 33 kW).
Según el comunicado, consultado por FEPEX, en el caso de la patata para consumo, el aumento medio del precio de la electricidad en 2023 para los almacenes con potencias superiores a 36 kwa será del 500%
Para la patata de siembra, el coste medio de la electricidad en 2023 pasará de 1.102,68 euros la hectárea a 2.150,23 euros la hectárea, lo que supone pasar de 36,75 euros la tonelada a 71,67 euros la tonelada. En 2023 se prevé que el coste de la electricidad representará el 14% del total de los costes de producción frente al 7,6% que ha representado este año.
En cuanto a otro tipo de producciones hortofrutícolas como pera y manzana, que también son conservadas una gran parte del año en cámaras frigoríficas, el coste medio de almacenamiento para 2023 pasará de 0,02 euros a 0,1 euros por kilo, lo que supone un incremento del 400%.
Ante esta situación l’UNPT, FN3PT, Légumes de France, y la FNPF. piden que el gobierno incluya a todas las explotaciones agrícolas con almacenes con potencias contratadas superiores a 36 Kwa en el denominado “escudo energético”, un conjunto de medidas que ha puesto en marcha el gobierno galo, limitando el precio del gas y de la luz y que van destinadas principalmente a hogares y pymes.